Nota Inicial:
La presente publicación fue escrita y elaborada por un colaborador y amable lector de este Blog. Este artículo NO fue escrito por el habitual escritor y responsable de este sitio Noé Molina. (*)
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¿Las Religiones benefician a la Humanidad?
Desde nuestro punto de vista ¡NO!, nunca lo han hecho ni nunca lo harán. Sin embargo, siempre se ha escuchado, mejor decir, se escucha constantemente cuando algún iluminado o sus jerarcas abren la boca y no precisamente desde los antiguos púlpitos y sí por medio de toda la tecnología hoy disponible. Ahí se escucha decir que personas religiosas son buenas y de buen carácter, cosa que no dudamos habrán muchísimas como ocurre en todos los estamentos de la vida.
Pero es obvio, en este caso concreto hay que decir que las religiones generan preconceptos en todas las sociedades, pues los seres humanos tienen la pésima costumbre de no aceptar las diferentes opiniones. Como los ateos no tenemos religiones acabamos recibiendo y sufriendo algún tipo de pre-concepto también.
No necesitamos frecuentar iglesias, templos de cultos diversos, sinagogas, mezquitas o cuales quieras instituciones de carácter religiosos para sentirnos personas de bien. Entendemos que debemos procurar aprender con otras personas las convivencias diarias, pero sin someternos a sus religiones y sí en sus peculiaridades culturales, si las hubiese, lo que nos enseñan y sorprenden ante nuestras críticas constructivas.
Sabemos, aunque infelizmente no todas las personas, que las religiones a pesar de decir que divulgar la paz, el amor fraternal, la solidaridad, ellas son las causantes de los mayores conflictos que han existido y existen en las sociedades. Parece una contradicción, pues resulta que no es conocida en todo sus “esplendores” de que la fe sea utilizada para conducir hombres a las guerras, atentados suicidas, provocar hambres, torturadoras y unas formas horrorosas de violencias, en el pasado y actualidad.
Independientemente de las diferencias religiosas, filosóficas y culturales de cada sociedad e individuo, lo que nosotros necesitamos y venimos gritando constantemente es que haya más compasión, bondad, amor, etc. Aprender de una vez por todas que la violencia, cualquiera de ellas, venga de donde vengan, no resuelve nada y que quieran o no todos los seres humanos somos iguales.
¿El deseo de mantener la reputación elevada aumentaría la generosidad religiosa? Eso es lo que pretenden hacer creer y lo consiguen, pero no con toda la humanidad. Como es sabido las religiones del mundo entero predican la compasión y la caridad, pero, ¿será que tanto sus cleros como los seguidores practican más esas virtudes que los no creyentes? ¿El impacto religioso en la vida social es positivo? Los datos actuales y no nos referimos a los relacionados a siglos pasados, demuestran que no, aunque ellos al tener los medios más sofisticados en relación con engaños digan que sí.
Las experiencias que tenemos surgieren que las personas religiosas tienden a seguir lo que predican en la vida social, pero eso sí, principalmente en el contexto de que favorezcan sus propias reputaciones delante de otras personas e igualmente dirigiendo sus actos compasivos y caritativos, en general, a miembros de su propia fe; es decir, a los de su propio redil; tantas presencias hagan en las iglesias, rezos, letanías, etc., tantas veces serán ayudadas y bendecidas…, más aún, si estas son de condición baja, o sea, pobres e ignorantes…
Las machaconas hipótesis de que las religiones hacen el bien en la vida terrenal y social (sin olvidad el premio celestial), lo hacen más por los motivos aparentes y egoístas que sabemos pero no siempre divulgados. Por otro lado existen conceptos favorables a la vida en sociedad, pero de la propia religión. Algunos investigadores no están interesados en aprobar o desaprobar la existencia de un dios, pues hay tantas personas involucradas en favorecer la fe que tardará aún muchísimos años en que tengan una posibilidad de dejar el redil. Así pues, se trata de investigar apenas la manera de entender cómo es que la religiosidad y sus conexiones con lo social surgieron a lo largo de la evolución humana.
El cuestionamiento consiste en seguir las diferentes sectas sobre el impacto siguiente. El párrafo de los evangelios atribuidos al personaje Jesús, “Amar a vuestros enemigos”, o aquel otro de la biblia, “Ojo por ojo, diente por diente”, por ser divulgado por el cristianismo, parece tener un significado. La idea es que existen mecanismos mentales o sociales capaces de “convencer” a las personas de que vale pena obvias y contundentes. Si cotizamos los hechos que las religiones han protagonizado en el mundo y el supuesto bien que dicen y ha repercutido en la sociedad, éstas, por supuesto, están dando inevitablemente un saldo súper que negativo.
Guerras religiosas y políticas de toda índole, a empezar por la cacareada biblia, leyes estúpidas y absurdas, represiones sociales, daños materiales individuales y sociales, etc. Pero lo peor es que aún hoy en pleno siglo XXI, el de las tecnologías, asistamos a actitudes aberrantes de esas que “claman a los cielos”, claro está, si existiese algo o alguien allí a quien grítarle. El ejemplo más contundente lo tenemos, infelizmente hace ya un año, la pandemia, pues esta como todas las que ha habido sean por medio de guerras, crisis políticas a las cuales se le pide al dios de dioses que lo arregle, ese dios no aparece por ningún lado, pues resulta que todavía no se han dado cuenta que no existe… Yo un simple mortal digo que si tuviera el mínimo poder que se le atribuye a ese dios, en este caso judío cristiano, de seguro que arreglaría el mundo, pero al tener los pies en la Tierra sé que eso es una gran invencibilidad.
Los ateos sabemos, por experiencias propias que no basta serlo y esperar que los otros se den golpes en la cabeza y lleguen a las mismas conclusiones, porque una, mejor decir muchas, de las características de las religiones es no tener iniciativas de pensamientos y acciones racionales y con lógicas. El resultado es que tanto el clero como su divulgada religión, por cierto única y verdadera es la mejor de todas las otras. Los ateos acostumbran tener una cierta actitud de aceptación y se es feliz dentro de las posibilidades del sistema que nos ha tocado vivir y sabiendo que tiene que luchar contra esa droga llamada religión hasta que un día ella deje de existir. Los cleros solo quieren rebaños de creyentes para sus propias glorias. ¡No caben dudas, son peores que los virus! ¡Y precisamente en estos momentos tenemos motivo de causa! ¡No es por casualidad ni por capricho que nos sentimos antirreligiosos!
Los ateos, como cualesquiera otras personas similares, incomodan porque piensan. Todo individuo que no acepta reglas y ordenes sin cuestionarlas, eso está mal visto. Siempre que se pregunte “demasiado” es cosa “mala”, y lo venimos viendo desde nuestras infancias, precisamente más aquellos que nos impusieron obligatoriamente el catolicismo en nuestras mentes en nuestras más tiernas infancias.
En aquella época, hoy puede que haya variado un algo, los que hacían muchas preguntas al profesor auto titulado “hermano”, por tener gran curiosidad, éstos siempre encontraban una postura autoritaria con lo cual les negaban las respuestas y el derecho de seguir preguntando. Eran considerad@s “niñ@s problemátic@s”. Resulta que los que preguntaban por ser activos, por tener curiosidad de las cosas de la vida, los que querían aprender, etc., todo eso llega a ser poder, por lo que si ellos aprenden mucho quien sabe si llegan a saber más que el propio profesor y ahí, tal vez, pierdan la autoridad sobre ellos en ciertas cuestiones.
Es por lo que creemos que el tener conocimientos y respeto no es lo mismo que tener curiosidad infantil. Infelizmente esas represiones intelectuales y no en todas las escuelas, están siendo mudadas a paso lento. Cabe aún decir que aquellos que prefieren ser “corderos” y creerse todo los dogmas y letanías pueden quedar a merced de sus “pastores” y de sus iluminadas voluntades…
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(*) Nota Final:
El autor de esta publicación es "Zerimar Ilosit", fiel seguidor y colaborador de este Blog; quien amablemente me solicitó el compartir este artículo con el resto de los lectores; y al no estar en contra de la filosofía del Blog, es un honor para mí el poder publicarlo.
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Ver:
Carta Abierta a los Creyentes
(Colaboración)
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Buenas Razones para No Creer
(Colaboración)
Ver:
Los "Milagros" de Jesús
(Colaboración)
El Misterio de la Trinidad
(Colaboración)
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Ateísmo… ¿Eso qué es?
(Colaboración)
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Quien es Dios?
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¿Existió Jesús?
¡Claro, existieron muchos!
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Top 10 “Metidas de Pata” de la Biblia.
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Excusas Cristianas: Nº 12
“Estás equivocado; pero no tengo tiempo de explicarte”
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Excusas Cristianas: Nº 13
“¡Los Ateos También...! (Tu quoque)”
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Excusas Cristianas: Nº 14
“Amenazas e Insultos a los Ateos”
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Excusas Cristianas: Nº 15
“Muchas más Absurdas Excusas sin Sentido”
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Top 10 Versículos Bíblicos usados como Excusas en los debates con Ateos
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"Yo no creo en nada. Para mí la fe es algo tan odioso como lo es pecado para los creyentes. El que sabe, no puede creer. El que cree, no puede saber. El término "fe ciega" es una redundancia, pues la fe es siempre ciega"
Ernest Bornemann