miércoles, 31 de marzo de 2021

Mitos y verdades de Jesús: la muerte sin testigos.

 




Mitos y verdades de Jesús: la muerte sin testigos


El acontecimiento más detallado de los evangelios es el de la pasión y crucifixión, pero los discípulos no estuvieron allí. ¿Cómo se escribió algo que nadie vio?


CADENA SER
J.H.S.09/04/2009 
- 09:38 h. CEST

La lectura de los cuatro evangelios (Mateo, Marcos, Lucas y Juan) ofrece un pormenorizado detalle de cómo fueron las horas previas desde la última cena, hasta el momento mismo de la muerte en la que se atribuye la pronunciación de una frase: 'Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu'. Tácito, el historiador romano, escribe que Jesús "fue condenado a muerte durante el reinado de Tiberio por el gobernador Poncio Pilato". Flavio Josefo menciona al prefecto romano que lo "condenó a la cruz".

¿De dónde surge la reconstrucción de los acontecimientos, las conversaciones mantenidas con Pilato, el Sumo Sacerdote de Israel Caifás, y hasta los diálogos con los ladrones?

Los expertos coinciden en que la composición de la pasión y muerte ofrecen una mirada con el enfoque de las comunidades cristianas que dejaron de ver a Jesús como hombre y lo convirtieron en Dios. El libro de J.A. Pagola explica que el evangelio de Mateo está plagado de menciones proféticas del Antiguo Testamento, introducidas con el fin de dar cuenta de que todo lo que esperaba Israel se había hecho realidad en ese hombre condenado a la cruz.

Cada evangelio ofrece su versión de la pasión. Por ejemplo, la última cena no pudo ser la típica cena pascual, porque los relatos hablan de la ejecución en Jerusalén el día anterior a la Pascua judía, y los escritos no precisan ningún dato concreto de la celebración tradicional, por lo que de haber existido este hecho, no fue con motivo de la Pascua, sino un encuentro con sus discípulos.

Los primeros cristianos, a medida que la imagen de Jesús se iba convirtiendo en Dios, comenzaron a recrear los momentos de la pasión y los detalles de los que no hubo testigos.


¿Por qué condenan a muerte a Jesús?

La tradición nos dice que fue por la blasfemia de considerarse el Hijo de Dios, el Rey de los Judíos y el Mesías, sin embargo, las razones no parecen suficientes. Hay un dato más mundano: en el pueblo judío surgieron muchos líderes con planes de rebelión ante el dominio de Roma. Estas revueltas terminaban siempre de la misma manera:;con la condena a muerte de los cabecillas y en lugares públicos y concurridos para que los hechos sirvieran de lección.

En el año 45, Teudas era un líder que fue condenado a muerte por orden del gobernador Fado. En el 55, un profeta popular conocido como el Egipcio fue asesinado junto a sus seguidores por órdenes de Félix. Era un hecho muy común y la mejor manera de atemorizar al pueblo. Por lo tanto, un movimiento nuevo que pusiera en duda la autoridad de Roma y, sobre todo, de los sumos sacerdotes de Israel, era motivo suficiente para una condena a muerte. Algunos investigadores creen que la anécdota del templo en la que Jesús la emprende a palos contra los puestos de venta, pudo ser la razón que motivó su detención y posterior ejecución.




Las imágenes que impuso la tradición muestran a un Jesús ensangrentado, de mirada triste, cargando una cruz. La crucifixión tenía una técnica muy mecanizada y era uno de los castigos que el Imperio romano adoptó de los cartagineses: torturar a un condenado y clavarlo en una cruz, en un lugar concurrido para que sirva de escarnio hacia quienes piensen en desafíar la autoridad de Roma. El Gólgota es un monte a las afueras de Jerusalén, sobre un camino muy transitado. La crucifixión muestra a un hombre cargando un 'patibulum', el madero horizontal, custodiado por unos cuatro soldados. Las ejecuciones suelen incluir a varios condenados.

La muerte de un crucificado es lenta y se produce por asfixia, ya que el paso de las horas agota y entumece los músculos, al no poder sostenerse el peso del cuerpo, los pulmones pierden la capacidad de incorporar oxígeno. La agonía puede durar días, por eso era frecuente romper los huesos de las piernas de los condenados, para que al quedar suspendidos de los brazos, sin apoyo, la muerte sobreviniera rápidamente.

Otro detalle es que las crucifixiones no se ejecutaban a gran altura. La representación típica de Jesús en la cruz lo muestra con los pies por encima de la cabeza de un adulto de pie, por el contrario, la altura no estaba más allá de los 40 centímetros del suelo. Cuando el condenado moría, su cuerpo era alimento de las aves de rapiña y de los perros salvajes y los restos eran retirados días después para ser tirados en fosas comunes.

Las ejecuciones en Judea eran ordenadas por la autoridad romana, en este caso, Poncio Pilato (hace algunos años se descubrió un edificio en el que su nombre estaba inscripto). El nuevo Testamento hace hincapié en la presión de las autoridades judías para que Jesús sea ejecutado. Esta versión se atribuye también al temor de las primeras comunidades cristianas, que para evitar persecuciones de los romanos, remarcaron la responsabilidad de los judíos en la muerte de Jesús.

A partir de las fuentes (evangelios canónicos, apócrifos y otros datos) la muerte de Jesús habría sido el 7 de abril del año 30, a los 36 años de edad (recordar que está reconocido el error del calendario gregoriano).

Nada se sabe qué pasó con el cuerpo, una vez que había muerto. Sus discípulos habían huido por temor a ser capturados y condenados. Los evangelios hablan de un hombre que pidió autorización para retirar el cuerpo y enterrarlo en un sepulcro nuevo, pero siendo la víspera de Pascua, una celebración tan importante, parece difícil que la burocracia de aquellos tiempos actuara con tanta celeridad para permitir el acceso a un condenado a muerte.

La evidencia de estos acontecimientos es difícil de contrastar, los datos son mínimos. En 1990 se descubrió en Jerusalén el osario que supuestamente pertenecería al Sumo Sacerdote Caifás, mencionado como el principal impulsor de la condena a muerte de Jesús. Ya dijimos que las evidencias sobre Pilato fueron descubiertas en excavaciones donde su nombre aparecía inscripto en un edificio.

La recreación de la crucifxión es un relato adornado por escribas que fueron incorporando los hechos a medida que el nombre de Jesús, un hombre que había cautivado como un profeta y líder espiritual, se fue convirtiendo en "el Hijo de Dios" o "Dios encarnado".




Fuente:
https://cadenaser.com/ser/2021/03/30/sociedad/1617118161_910830.html
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lunes, 29 de marzo de 2021

Soy Atea pero salgo en procesión en Semana Santa (Opinión y Actualidad)






Soy atea pero salgo en procesión en Semana Santa


Perra de Satán
17/04/201909:16 h.

Aclaración: me gusta la Semana Santa, sí, pero la de Zamora. Aunque tengo que reconocer que con los años me ha entrado bastante curiosidad por descubrir cómo se celebra esta tradición en otros lugares de España, e incluso del mundo. Porque, al fin y al cabo, la forma en la que celebramos nuestras festividades nos define culturalmente. Y eso es lo que supone celebrar la Semana Santa de Zamora para mí: formar parte de mi cultura. 

En Zamora no hay otra semana como la Semana Santa. Es una ciudad pequeña, con otras muchas fiestas y otras muchas tradiciones, pero ninguna se celebra al nivel que vivimos los zamoranos nuestra querida Semana Santa. De hecho, es que cualquier zamorano semanasantero sabe que en Zamora puede ser Semana Santa todo el año, porque cuando no estás desfilando en la calle, estás ensayando con tu banda de música, teniendo una cena de Hermandad, asistiendo al triduo del Espíritu Santo o colándote en la catedral aprovechando cualquier evento (que es uno de mis hobbies preferidos) para ir a ver al Santísimo Cristo de las Injurias sin tener que pagar la entrada. 

Siempre me resulta extraño encontrarme con algún zamorano al que no le gustan nuestras procesiones. Yo ni siquiera pude elegir. Siendo muy, muy pequeña, (es probable que en mi primer recuerdo semanasantero tuviera yo tres años, pero ya se sabe que la mente suele engañar con este tipo de datos) mi abuelo ya me llevaba a ver la procesión de cada día. Me subía a sus hombros y yo me quedaba fascinadísima con lo que estaba ocurriendo delante de mis ojos. 

Porque eso es, en definitiva, cualquier Semana Santa: una puesta en escena. Un espectáculo de luces, sombras, olores, sabores, colores, sentidos y sonidos, una experiencia estética bastante fuertecita que apela directamente a nuestras emociones, y no solo a las religiosas (nunca se me olvida que esto no deja de ser un homenaje al misterio más 🔝 de la religión cristiana), sino a las más profundas del ser humano. No creeré en Dios, pero creo firmemente que es IMPOSIBLE ver una procesión zamorana (en concreto, un Cristo de la Buena Muerte o un Jesús Yacente) y no sentir algo. Aunque sea miedo, que recuerdo que un año llevé a un amigo a ver el canto del Jerusalem, Jerusalem y le dio un ataquito que nos tuvimos que marchar a la mitad. 




Por eso, nunca he pensado que sea necesario creer en Dios para participar de la Semana Santa. Es un poquito incoherente, en eso estoy de acuerdo, pero esto es un poco como el amor para Lope de Vega: quien lo probó lo sabe. Sabe que esto que digo es cierto. Quien ha vivido desde dentro una Semana Santa en Zamora sabe que esto trasciende la religión. Esto es pura esencia zamorana. 

Es despertarse la mañana del jueves de dolores con una sonrisa en la cara. Es ir a comprar una bolsa de pipas y que te den una pipelera. Es decir "no hay quien camine por Santa Clara". Es sentarse en el suelo a esperar una horita hasta que pase la procesión. Es la fuerza unánime de las voces que cantan el Miserere. Es recibir una caricia de un cofrade sin saber quién es. Es el olor a incienso. Es silencio. Es ruido de tambores. Es volver a casa (Home is where Semana Santa de Zamora is). Es reencontrarte con tus amigos. Es abrazar a tus hermanos de cofradía cuando termina la procesión. Es la cola interminable de La Valenciana. Es que te den una almendra garrapiñada sin bolsita y que la mires con cara de "yo no me voy a comer esto". Es falta de sueño, dolor de espalda. Es tocar Thalberg hasta que te sangran los labios. Es una lagrimilla que se te escapa cuando le ves los faros al paso que está saliendo. Es meterlo al son de Los Clavos. Son las meriendas. Es comer Dos y pingada con una penalegría muy grande. Es contar los días que faltan para que todo vuelva a empezar. 

Vamos, que si no crees en Dios, todavía te quedan muchísimas cosas que disfrutar. Y si crees, mejor, supongo, porque la experiencia será más completa.



Fuente:
https://www.yasss.es/primera-persona/semana-santa-atea-procesion_0_2534700287.html
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“No hay sociedad en la historia humana que haya sufrido porque su gente se volvió demasiado razonable”


Sam Harris



viernes, 26 de marzo de 2021

Por qué los ateos y los creyentes tienen una concepción distinta de moral (Actualidad y Noticias)

 




Por qué los ateos y los creyentes tienen una concepción distinta de moral


¿Influye de algún modo la creencia en una sustancia divina en el modo en que nos comportamos con los otros o juzgamos lo que es bueno o malo? Un estudio tiene la respuesta

Por E. Zamorano
04/03/2021 - 05:00

A medida que vamos conociéndonos más a nosotros mismos y al mundo que nos rodea nos surgen diferentes preguntas. Una de las más esenciales y personales tiene que ver con la religión. Puede que hayamos recibido una educación católica heredada, ya que al fin y al cabo este es el tipo de fe más común y habitual en nuestro país, pero eso no quiere decir que, una vez nos hagamos mayores, tendamos hacia otro tipo de religiones o creencias. Incluso, muchos desestimarán cualquier pretensión religiosa y se reconocerán dentro del ateísmo. 

Creamos o no en la existencia de un ser superior, esto no tiene que determinar de ninguna forma el modo en que nos comportamos en nuestra vida con los demás. No es mejor persona aquella que tiene unos valores religiosos férreos, aunque evidentemente muchos de estos preceptos, sobre todo los cristianos, son 'a priori' positivos al estar condensados en la mítica frase que pronunció Jesucristo, el que se considera como el último mandamiento: "amaos los unos a los otros como yo os he amado". A pesar de esta frase tan elogiosa y bonita, la religión también tiene muchos lados oscuros, por lo que no deberíamos juzgar la bondad de una persona solo por el Dios al que le rece, al igual que tampoco podemos considerar como mala a esa gente que se declara atea. 

Los valores morales que les diferencian a ambos son los relativos al respeto a las figuras de autoridad, así como el sentido de lealtad

Hasta ahí todo correcto. Pero ahora un estudio, publicado en la revista científica 'PLOS One', siembra la polémica sobre las diferencias entre personas creyentes y ateas en el ámbito de la moral. Los resultados reflejaron que ambos coincidían en aspiraciones igualitarias para la sociedad, así como en la defensa de los más vulnerables dentro de un grupo social. Sin embargo, a la hora de preguntar por asuntos que tenían que ver con la cohesión grupal, la lealtad o el respeto a la autoridad, la investigación demostró que estos dos tipos de personas diferían.

Para analizar la brújula moral que regía a ambos grupos, Tomas Ståhl, profesor de psicología en la Universidad de Illinois, Chicago, mandó responder a cuatro encuestas a los participantes. Las dos primeras fueron realizadas a un total de 429 estadounidenses, mientras que las otras dos a 4.193 habitantes de Estados Unidos (un país relativamente religioso) y Suecia (un país menos religioso que el anterior). El cuestionario incluía preguntas sobre historias personales, creencias religiosas, orientaciones políticas y juicios morales, según recoge 'Live Science'.



Tres puntos de conflicto

Ambos grupos coincidieron en el alto valor de la justicia y la igualdad, junto con la tendencia a proteger siempre a los más vulnerables, lo que demostró que la brújula moral de ambos era bastante positiva y sana, al saber diferenciar plenamente lo justo de lo injusto. Sin embargo, Ståhl halló que había grandes diferencias entre ateos y creyentes en lo que respecta a otros tres valores morales: el de "autoridad" (respetar las figuras de policías, padres o maestros), "lealtad" (ser leal al grupo social en el que se mueve uno, en este caso un país o nación) y "santidad" (no hacer nada percibido como degradante o humillante, sobre todo en un sentido sexual).

Esto no quiere decir que los ateos sean peores personas, ni mucho menos; ambos se rigen por los principios de una buena ética con los demás 

"Se cree que estos tres valores están al servicio del sentido de cohesión grupal, lo que mantiene unido a un conjunto de personas", asevera Ståhl. "En lo que respecta a estos preceptos, existe una gran diferencia entre ambos grupos. Las personas religiosas obtienen puntuaciones mucho más altas en ellos, los ven como mucho más importantes por ser morales en comparación con los ateos". Es decir, "los que no creen en ningún Dios no piensan que estos tres valores morales son tan relevantes como todos los demás". 

Evidentemente, esto no quiere decir que los ateos sean peores personas que los creyentes, ni mucho menos. Ambos coinciden en valorar como malas muchas cuestiones morales que son negativas, como por ejemplo la pregunta por la ética: "Estoy dispuesto a no ser justo y comportarme mal si eso me ayuda a tener éxito". En dicho interrogante, los dos grupos respondieron que les parecía moralmente malo. Ambos grupos de personas respaldaron de forma vehemente el valor de la libertad frente a la opresión, y estaban de acuerdo en afirmaciones como 'La sociedad funciona mejor cuando permite que los individuos asuman la responsabilidad de sus vidas sin decirles qué hacer'.


'El problema del tranvía'

Uno de los resultados más curiosos que comprobó Ståhl es que los ateos eran más propensos a basar sus juicios morales basándose solamente en la consecuencia de sus acciones, a diferencia de los creyentes. Uno de los problemas que les puso es imaginar que estás a punto de coger un tranvía. En apenas unos segundos, el tranvía pierde el control y puede matar a cinco personas que hay en el andén delante de ti, mientras que si aprietas un botón para desviarlo, tan solo matará a una persona del otro andén.

"En esta situación, los ateos tienden a escoger la segunda acción, para que así solo muera una persona en vez de cinco, ya que están evaluando el daño relativo", afirma Ståhl a la página 'Words Side Kick'. "Mientras, los creyentes prefieren no pulsarlo porque estarían tomando la decisión consciente de matar a alguien, y en su credo no pueden matar. Por tanto, se suelen sentir más incómodos ante estos cálculos". Sea como sea, los juicios morales de cada uno son muy personales, creas o no en una sustancia divina que rige nuestros destinos.


Fuente:
https://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2021-03-04/religion-ateos-creyentes-moral-filosofia_2972552/

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lunes, 22 de marzo de 2021

Diezmo: Una práctica nada cristiana parte III (Colaboración)

 



Nota Inicial:
La presente publicación fue escrita y elaborada por un colaborador y amable lector de este Blog. Este artículo NO fue escrito por el habitual escritor y responsable de este sitio Noé Molina. (*)


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Diezmo: 
Una práctica nada cristiana 
parte III


El antiguo testamento tiene una relación inherente con la traición judía más que por la cristiana, sabemos que la única cosa en común que tiene ambas religiones es que se adora a un mismo dios (Jehová), seamos claro estimado amigo lector, el antiguo testamento no tiene nada que ver la cristiandad, el hecho que se adore a un mismo dios, no significa que compartan similitudes, por lo tanto es un error grande que muchos pastores utilicen los versículos del antiguo testamento como ellos quieren, como si este fuese un mensaje dirijo a la población cristiana. Pero existe un nuevo testamento, un compendio de libros que se acercan más a las creencias y tradiciones cristianas.

¿Qué nos dice el nuevo testamento de los diezmos? 

Partiré bajo la premisa que el cristiano moderno vive bajo el nuevo pacto, es decir bajo las enseñanzas de cristo; aunque existe ciertos grupos cristianos que afirman que los cristianos no viven bajo ningún pacto, pero bueno es un asunto de dominaciones que discrepa una con otras. 

En el nuevo testamento no se encontrará ninguna mención de los diezmos, a duras penas podemos encontrar este indicio en el libro de los hebreos y es para recordarles a los nuevos seguidores de cristo que el diezmo está bajo ley mosaica y quienes ciertamente reciben el diezmo son los levitas. 

Según la ley de Moisés, los sacerdotes que son descendientes de Leví tienen el derecho de cobrarle al pueblo la décima parte de todo, a pesar de que son sus parientes y descienden de Abraham lo mismo que ellos. Hebreos 7:5 

De aquí solo existen interpretaciones a conveniencias y buscarle la quinta pata al gato donde no la hay. En las enseñanzas del nuevo testamento no indica que sus seguidores tengan que ofrendar de acuerdo a un sistema como sucede en la tradición judía, al contrario, anima a los creyentes contribuir de acuerdo a sus posibilidades. 
 
“Que cada uno dé como propuso en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al dador alegre. 
II Corintios 9:7

No es raro que el pastor de iglesia trate de engancharlo con una artimaña manipuladora como: 

- Puede ver hermano, dios lo bendecirá en grande si usted da con animosidad sus diezmos. Recuerde lo que dice la biblia en segunda de corintios, dios bendice al dador alegre. 

Si dios bendice al dador alegre, entonces ¿Por qué no vemos a los pastores evangélicos dando alegremente sus diezmos a los pobres, ancianos o a los enfermos? Si ellos se vuelven obsequiosos con los diezmos ¿No cree usted estimado lector que dios los bendecirá por esas acciones? Basados en las enseñanzas del nuevo testamento eso tendría lógica, pero los pastores saben que el mundo real no funciona así, y por lo tanto esa fantasía no es aplicable para ellos, sino para los incrédulos creyentes. 
 
Recuerde estimado amigo, si usted tiene el deseo honesto ayudar hágalo, pero sea sincero con usted mismo, porque le aseguro que si le pide una moneda un vagabundo lo primero que le dirá es ¡Vete a trabajar haragán desobligado! Claro, pero si fuera el pastor de su iglesia, le daría hasta la escritura de su casa… ¡Ah! solo bromeo estimado creyente, usted puede hacer lo que quiera con su dinero, a fin de cuenta es suyo, pero mantenga al tanto que usted no está obligado rendir cuentas a un líder religioso, si desea ayudar a su iglesia, hágalo, pero como usted disponga.  

“Ahora bien, en cuanto a la ofrenda para los santos, haced vosotros también como instruí a las iglesias de Galacia. Que el primer día de la semana, cada uno de vosotros aparte y guarde según haya prosperado, para que cuando yo vaya no se recojan entonces ofrendas. Y cuando yo llegue, enviaré con cartas a quienes vosotros hayáis designado, para que lleven vuestra contribución a Jerusalén.” 
I Corintios 16:1-3
Por otra parte, hemos hablado que el diezmo forma parte de la ley mosaica, incluso hemos dicho que se supone que usted como creyente vive bajo un nuevo pacto, una enseñanza basado en los preceptos de Jesús y no bajo ley judía. 

“Cuando Él dijo: Un nuevo pacto, hizo anticuado al primero; y lo que se hace anticuado y envejece, está próximo a desaparecer. 
Hebreos 8:13



Jesús y los fariseos 

Existe un pasaje bíblico donde Jesús tiene una confrontación con uno fariseos acerca de los impuestos, obviamente el personaje cristo sabía que las preguntas de los judíos fariseos eran un poco tramposas, con propósitos mal intencionados. 

15 Después de esto, los fariseos fueron y se pusieron de acuerdo para hacerle decir a Jesús algo que les diera motivo para acusarlo. 16 Así que mandaron a algunos de sus partidarios, junto con otros del partido de Herodes, a decirle:
—Maestro, sabemos que tú dices la verdad, y que enseñas de veras el camino de Dios, sin dejarte llevar por lo que diga la gente, porque no hablas para darles gusto. 17 Danos, pues, tu opinión: ¿Está bien que paguemos impuestos al emperador romano, o no?
18 Jesús, dándose cuenta de la mala intención que llevaban, les dijo:
—Hipócritas, ¿por qué me tienden trampas? 19 Enséñenme la moneda con que se paga el impuesto.
Le trajeron un denario, 20 y Jesús les preguntó:
—¿De quién es ésta cara y el nombre que aquí está escrito?
21 Le contestaron:
—Del emperador.
Jesús les dijo entonces:
—Pues den al emperador lo que es del emperador, y a Dios lo que es de Dios.
22 Cuando oyeron esto, se quedaron admirados; y dejándolo, se fueron. 

Mateo: 22:15 – 22

El creyente utiliza este dialogo de cristo con los fariseos como prueba fehaciente que en “épocas de Jesús se diezmaba”, pero lo cierto es que en esas épocas no existía el cristianismo como tal, se supone que dicha religión se da a conocer con los apóstoles no con Jesús.

Además, el dialogo no refiere que el creyente tenga el deber de dar sus diezmos, este dialogo tiene que ver con muchos tintes políticos y sociales. Veamos. Sabemos que Judea estaba bajo la ocupación Romana en los años 66-73 DC, asunto que la población judía no les agrado del todo, formándose así, facciones en contra del imperio romano y también grupos que congeniaban con el emperador Augusto Cesar, me limitare mencionar que Roma no la tenía nada fácil en Judea, tenía enemigos por todos lados, el ciudadano tenía que guardar cierta cautela, porque si se consideraba simpatizante del gobierno romano se haría enemigo gratuito de la facción zelota y saduceos, en caso contrario si eras un rebelde opositor a la administración romana, automáticamente serias un enemigo del imperio. 

Con Jesús esto no era diferente, no podía orientarse a ningún bando por el simple hecho que se vería en serios aprietos, entonces hizo lo que mejor pudo hacer, mostrarse neutro ante esa situación y no verse comprometido a problemas gratuitos. “Denle lo que pertenece a Cesar, y a Dios lo que es de Dios". Es decir, paguen sus impuestos al gobierno, pero sin desatender sus obligaciones ante la ley mosaica, tan simple como eso. 




El Joven Rico 

Estimado lector, supongo que usted ha escuchado la historia del joven rico, aquel que le intervino a Jesús pidiéndole consejos de cómo ganarse el paraíso, en la que Jesús le contesto – vende todo y sígueme – la reacción del rico no se hizo esperar, se sintió decepcionado porque no quería vender todo por lo que había trabajado, a lo que Jesús le respondió, ¡Qué difícil va a ser para los ricos entrar en el reino de Dios! Luego se dirigió a sus discípulos y les dijo, es más fácil que entre un camello en el ojo de aguja que un rico en los cielos. Para más detalles Mateo: Marcos 10:17-30

Imaginase que el pastor de iglesia estuviera en ese escenario, le pregunto ¿Cómo cree usted que hubiera reaccionado? ¿Cree usted que el pastor de iglesia se despojaría de todo por la causa de su maestro? No se preocupe estimado lector, yo respondo por usted, Absolutamente ¡NUNCA! Una cosa para ellos es, predicar de lo que ni ellos mismos creen y otra es dar el ejemplo, usted nunca verá a un pastor obsequioso con los pobres o los enfermos, aunque la biblia diga que dios bendice al dador alegre, ellos no creen en eso ¿Cómo sé eso? Simplemente ellos no tienen como intención dar, solamente recibir, recuerde estimado amigo lector, cuando usted necesita del pastor, él lo manda con dios, pero cuando el pastor necesita de usted, busca su cartera. 




Excusas de los defensores del diezmo 

1.  El diezmo es un mandato divino 

En el transcurso de los artículos publicados, entendimos que los diezmos no era solamente un asunto religioso, también tenía que ver muchos con asuntos políticos y sociales, ignorar estaríamos cayendo un error, en caso que fuese un mandato divino, esto sería para los judíos no para usted. 

2. Recuerde que dios bendice al dador alegre 

Esa artimaña la conozco al derecho y al revés, cuando vea a los pastores de iglesia despojándose de sus bienes y regalando todo con alegría, tal vez le crea. 

3. El libro de Malaquías 3:10 dice… 

Eso es un asunto de judíos, nada tiene que ver con el cristianismo 

4. Para que usted entienda la palabra de dios, debe tener un correcto entendimiento de las sagradas escrituras. 

Claro, interpretaciones bíblicas a conveniencia. Vaya que detalle

5. Los diezmos no son para el pastor, es para dios 

¿En serio? No pretenderá verme la cara de idiota verdad

6. La iglesia tiene gastos y por eso debemos de apoyarla 

Una casa es apoyar y otra es mantener a la familia entera del pastor, además los gastos de una iglesia no son comparados a una vivienda domiciliar, esto porque muchas iglesias estas exentas de impuestos, reciben descuentos especiales en los gastos básicos de agua potable y luz, para colmo, anualmente reciben un presupuesto por los gobiernos de turno. 

7. Solamente la gente miserable piensa así 

Si a mí me hace miserable no darle mi dinero a un tipo que tiene todo y no se muere de hambre, no me imagino en que categoría entra el pastor de iglesia cuando le niega ayuda al que necesita. 


Estimado amigo lector, fui evangélico durante mucho tiempo y se cómo funciona las artimañas de estos pastores sinvergüenza, no soy nadie para decirle que tiene hacer con su dinero. Pero de usted depende dejarse estafar o no por estos vividores. 


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(*) Nota Final:

El autor de esta publicación es "Yamil", fiel seguidor y colaborador de este Blog; quien amablemente me solicitó el compartir este artículo con el resto de los lectores; y al no estar en contra de la filosofía del Blog, es un honor para mí el poder publicarlo.

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