La muerte de Hitchens; o la vana espera de su conversión Cristiana.

Pido disculpas por las palabras que diré… pero me repugna y me asquea la actitud de algunos escasos Cristianos quienes como Buitres buscando carroña esperan la conversión en el lecho de muerte de algún Ateo famoso.

Y no solo eso; si no que también utilicen un momento tan aciago y duro para hacer apología de sus creencias.

Lamentablemente eso ocurrió con la reciente muerte del Periodista y Escritor Ateo Christopher Hitchens.

Cuando se anunció en 2010 que Hitchens padecía de Cáncer de esófago… enseguida se comenzaron a movilizar y a hablar los Religiosos, Teólogos y Creacionistas en torno a su desgracia. Bien sea pidiéndole o esperando su conversión hacia Dios antes de morir; o gritando a los 4 vientos que su enfermedad era el justo castigo por blasfemar en contra del Todopoderoso.

A pesar de su herético discurso y de ser siempre directo y franco en sus opiniones, Hitchens era muy querido y apreciado (y a la vez atacado) por muchos Creyentes y religiosos. Esto quizá porque no se negaba a una pugna o a algún debate. No tenía problemas en admitir sus errores y en cambiar dramáticamente de opinión (quizá por esto último es que surge la esperanza de algunos en su conversión final). Hitchens era un hombre integro y franco. Si en algún momento hubiese “dudado” de su Ateísmo… de seguro lo hubiese hecho público de inmediato.

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Sus excesos.

Su a veces bohemia vida en muchas ocasiones le ganó la simpatía y el ataque de muchas personas. Su innegable afición al cigarrillo y el alcohol hacían las delicias de sus admiradores y el ataque de sus enemigos quienes le acusaban de ser el “Ateo típico” Bebedor, fumador y mujeriego y que su vida terminaría súbitamente a causa de sus blasfemos gustos.

Un claro ejemplo de esto es lo que decía el perfil de la NRP (Network Radio Public) sobre Hitchens en junio de 2006: "Hitchens es conocido por su amor a los cigarrillos y el alcohol - y por su prodigiosa producción literaria". Suspendió brevemente los cigarrillos pero casi inmediatamente regresó a fumar hasta su diagnostico de Cáncer. Hitchens ha admitido beber en exceso. En 2003 escribió que su ingesta diaria de alcohol era suficiente "para matar o aturdir a una mula promedio", y señaló que muchos grandes escritores "hicieron algunos de sus mejores trabajos cuando estaban embotados, destrozados, contaminados, llenos de mierda, y con un par de hojas cerca para escribir".

El político británico George Galloway, fundador del partido socialista “Respeto” , cuando iba a testificar delante de la sub-comisión investigadora de los escándalos en la Petróleo n la ONU; llamó a Hitchens una "Ex trotskista presumido bebedor que no puede ni sostener una copa", de lo cual Hitchens se apresuró a responder, "Sólo algunas cosas de las que dice son ciertas". "Él dice que yo soy un ex-trotskista (cierto), un Presumido (es cierto también), y que no puedo sostener una copa (en este caso tengo que protestar).

Oliver Burkeman escribe: "…Hitchens afirma haber detectado una nueva sucia personalidad quienes lanzan ataques contra él, especialmente sobre su legendario consumo de alcohol. De hecho agradece que lo ataquen como "Bebedor”, porque “Yo siempre creo que es un signo de la victoria cuando se trasladan a ad hominem”. Bebe, dice, “Porque hace a las otras personas menos aburridas. Tengo un gran terror de ser aburrido. Pero puedo trabajar con o sin eso. Se necesita mucho para hacerme caer”.

En la sesión de preguntas y respuestas que siguió a un discurso Hitchens dio en el Commonwealth Club of California, el 9 de julio de 2009, un miembro del público preguntó cuál era su whisky favorito. Hitchens dijo que "el mejor whisky escocés en la historia del mundo es Johnnie Walker Etiqueta Negra” También indicó que en broma que era el whisky favorito de, entre otros, “del Partido iraquí Ba´az, de la Autoridad Palestina, de Gadaffi dictador de Libia, y de la Familia Real de Arabia Saudita". Concluyó su respuesta al llamarlo el "desayuno de campeones", y exhortó al público a " No aceptar ningún sustituto".

En su libro de memorias de 2010, Hitchens escribió: "Hubo un momento en el que podía ganarle a todos, incluso a los bebedores más empedernidos; pero ahora tomo más cuidadosamente" Él describe su rutina de consumo actual en los días de trabajo de la siguiente manera: “Aproximadamente a la mitad del mediodía, un decente trago del ámbar restaurador del Sr. Walker, cortado con agua Perrier (un sistema ideal) y sin hielo. En el almuerzo, tal vez media botella de vino tinto... No más que eso, pero tampoco menos. Luego de vuelta al escritorio, y dispuesto a repetir el tratamiento en la comida de la noche. Nada “después de la cena”, ni siquiera nada dulce y nunca, nunca brandy". “Todo dependerá de lo bien que avance el día, pero siempre tomo lo que he mencionado antes. No hay que mezclar: No andar por ahí con una ginebra aquí y un vodka allá”

Al reflexionar sobre el estilo de vida que mantenía en su carrera como escritor, dijo:

“Yo siempre supe que era un riesgo en el estilo de vida bohemio... Me decidí seguirlo, ya que ayudó a mi concentración, me detuvo el aburrimiento y detuvo a otras personas a ser aburridas. Lo hago cuando me dan ganas de prolongar la conversación y mejorar el momento. Si usted me pregunta: ¿lo volverías a hacer? Probablemente diría que sí. Pero he dejado de fumar un poco antes con la esperanza de salirme con la mía. Decidí que toda la vida es una apuesta y yo voy a apostar en esto un poco... De una forma extraña, no me arrepiento. Es imposible para mí imaginarme la vida sin vino, y otras cosas, anima a quienes te acompañan, me mantiene en la lectura y me dinamiza. Funcionó para mí. Realmente lo hizo”.

Sin lugar a dudas, estas “Aficiones” de Hitchens por el alcohol y el cigarrillo le tendieron una temprana trampa a su esófago.

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Su enfermedad.

En junio de 2010, Hitchens pospuso su gira de promoción de sus memorias para someterse a tratamiento para el cáncer de esófago. Hitchens reconoció que el pronóstico a largo plazo estaba lejos de ser positivo, y que iba a ser una "persona muy afortunada de vivir otros cinco años". En noviembre de 2010, Hitchens cancela una aparición programada en Nueva York, donde iba debatir sobre religión con los escritores David Hazony y Stephen Prothero sobre el tema de los “Diez Mandamientos”. A principios de ese año, publicó un artículo en la revista Vanity Fair sobre el tema y también estaba trabajando en un libro sobre los Diez Mandamientos.

Durante su enfermedad, Hitchens se encontraba bajo el cuidado de Francis Collins (Sí, el famoso Cristiano), y fue objeto de un nuevo tratamiento contra el cáncer diseñado por el mismo Collins, el cual mapea el genoma humano y ataca selectivamente al ADN dañado.

En abril de 2011, Hitchens se vio obligado a cancelar su aparición en la Convención de Ateos Americanos, y en su lugar envió una carta que decía: "Nada me hubiera impedido unirme a vosotros sino a la pérdida de mi voz (por lo menos mi voz para hablar), que a su vez se debe a una larga discusión que estoy teniendo con el fantasma de la muerte". Cerró con "Y no aceptare la fe". En la carta también rechazó la idea de una posible conversión en su lecho de muerte, en la que afirmaba que "la redención y la liberación sobrenatural parece aún más hueca y artificial para mí ahora que antes". En junio de 2011, habló ante la Universidad de Waterloo a través de un enlace de video en casa.

En noviembre de 2011, George Eaton, escribió en el New Statesman :

La tragedia de la enfermedad de Hitchens es que se produjo en un momento en el que disfrutó de un público más amplio que nunca. De su estrecho círculo de amigos (Amis, Fenton , McEwan, Rushdie) Hitchens fue el último en ganar renombre internacional, sin embargo, ahora se lee más que cualquiera de ellos.

Hitchens murió el 15 de diciembre de 2011 en la University ofTexas MD Anderson Cancer Center en Houston.

De acuerdo con sus deseos, su cuerpo fue donado a la investigación médica.

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Charlatanería Cristiana.

Luego de su muerte las reacciones y opiniones sobre su muerte por parte de quienes le admiraban y de sus amigos estaban dirigidas hacia esa asombrosa mezcla de escritor, periodista, polemista, y su carácter único. A su valiente en la búsqueda de la verdad. A su ingenio, conocimiento inmenso, y sobre todo a su valentía.

Mas, las observaciones suspicaces e interesadas de los “Cristianos” no tardaron en llegar:

Pongamos el ejemplo del mismo Francis Collins, director del Instituto Nacional de Salud y ex director del Proyecto Genoma Humano quien le había tratado su enfermedad.

"Voy a extrañar Christopher. Voy a extrañar el giro de su frase brillante, las bromas de buen carácter, su irónica sonrisa de lado cuando estaba a punto de hacer una observación que me hiciera reír a carcajadas. No cabe duda de que ahora sabe la respuesta a la pregunta de si hay más en el espíritu que sólo los átomos y moléculas. Espero que se muestre sorprendido por la respuesta. Espero oírselo algún día. Él lo diría muy bien".

Collins no puede dejar pasar la oportunidad de decir que ya Hitchens debe saber que hay un “mundo espiritual” después de morir. Nunca es tarde para hacer un poco de propaganda cristiana. En todo caso cuando en verdad le pudo ser útil a Hitchens (con el tratamiento contra el cáncer) lamentablemente no funcionó. Quizá Dios no ayuda a los Ateos enfermos (y menos si son bebedores empedernidos)

Muchos otros Cristianos no pierden la oportunidad para promover sus creencias personales con la muerte de Hitchens.

Veamos algunos:

Pastor Rick Warren , fundador de la Iglesia Saddleback en Lake Forest, California, expresó por Twitter,

"Mi amigo Christopher Hitchens ha muerto. Lo quise mucho y oró por él constantemente y he de llorar su pérdida. Él sabe la verdad ahora".

El Presidente de la Southern Baptist Theological Seminary, Albert Mohler, un líder influyente entre los evangélicos , también twitteo varias entradas en respuesta a la desaparición de Hitchens.

Él dijo que la muerte de Hitchens "Es un recordatorio terrible de las consecuencias de la incredulidad. Sólo podemos rezar para que otros crean."

Inmediatamente después de su primer post, Mohler agregó: "Pocas cosas son tan valoradas en esta vida como la brillantez y elocuencia. Esto no importará en el mundo por venir".

"El punto sobre Christopher Hitchens no es que él muriese en la incredulidad", concluyó, "pero su falta de fe es lo único que nos importa ahora. Es indeciblemente triste. "

Durante su tratamiento, los cristianos ofrecieron sus oraciones para el ateo, y también se estableció el "Día para que todo el mundo ore por Hitchens" el año pasado. Pero Hitchens recomienda los creyentes a no "molestar al sordo cielo con sus inútiles gritos", "a menos que, por supuesto, eso les haga sentir mejor." Él también dijo a CNN el año pasado que no quería volver a Cristo en su lecho de muerte, al menos no mientras estuviese lúcido.

Fue hace sólo dos meses en octubre, cuando Hitchens afirmó de nuevo sus creencias ateas, declarando que "no hay verdad absoluta" ni "ningún líder supremo."

Junto con otros líderes cristianos y ateos convertidos en cristianos, Lee Strobel, expresó su dolor por la muerte de Hitchens en Twitter.

"Yo estaba entre los muchos que compartieron la palabra de Cristo con él, es muy triste que haya rechazado el Evangelio", agregó Strobel.

Denny Burk, profesor asociado de estudios bíblicos en Boyce College, también lamentó la muerte del "intelectual único con un ingenio afilado y un lápiz aún mayor."

"Hitchens siempre me ha fascinado no sólo por su intelecto y su prosa, sino también por su independencia", escribió Burk en su página web.

"Era un niño mimado de la izquierda, sin embargo, él seguía siendo un partidario firme de la guerra de Irak. Él era un ateo declarado, sin embargo, insistió en la calidad superior de la Biblia King James, y gastaba bromas contra el género de traducciones neutras. Él quería prohibir los argumentos religiosos del discurso racional, sin embargo, él escribió un libro con el calvinista intelectual y pastor Doug Wilson."

"En el último año de su vida, Hitchens escribió algunos ensayos acerca de su cáncer y de su muerte inminente", continuó. "Parecía estar siempre firme en su ateísmo e insistir en que la hora de su muerte debía ser el campo de pruebas de su incredulidad."

"Me gustaría pensar que tal vez su escepticismo no ganó en la final", espera Burk. "Me gustaría pensar que el evangelio que le enseñó Wilson y otros podrían haber roto su incredulidad justo a tiempo como lo hizo con el ladrón en la cruz. Cosas más extrañas han sucedido, y el brazo del Señor, de hecho, no es corto para salvarlo, incluso en ese momento. Sin embargo, es posible que nunca tenemos ninguna evidencia de que la gloriosa luz finalmente se abrió paso en Hitchens"

El Pastor Douglas Wilson, un conservador teólogo reformado evangélico escribió en detalle acerca de su relación con el periodista británico-estadounidense y sus pensamientos sobre la muerte en la revista Christianity Today.

"Christopher sabía que los fieles cristianos creen una vez que el hombre muere, después le espera un juicio", escribió Wilson. "Sabía que creemos de lo que Jesús enseñó acerca de la realidad de la condenación. También sabía que creemos – y que yo le dije - que en esta vida, la puerta del arrepentimiento está siempre abierta"

"No tenemos ninguna indicación de que Christopher rogó al Señor antes de morir, y si no lo hizo, entonces las Escrituras enseñan claramente que se perderá para siempre. Pero tenemos muchos indicios de que Cristo murió por los pecadores, hombres y mujeres al igual que Christopher. Sabemos que el Señor ha contratado a más de un trabajador para su viña cuando el sol estaba casi escondido. "

Wilson sabía que Hitchens se refirió a ese aspecto de la fe, discutiendo varias veces con los entrevistados, la idea de una "conversión lecho de muerte."

A pesar de que aseguró a todos que si algo así como una conversión llegaba a suceder, tenía la certeza de que el cáncer o la quimioterapia le había metido esa idea en su cerebro, observó Wilson.

"Cuando Christopher dio estas entrevistas, estaba manifiestamente en su sano juicio; pero con todo lo que le ha ocurrido a él en estos últimos meses puede que ya no piense lo mismo”

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Cuando le preguntaban, en alguna conferencia o en una entrevista, si veía posible un despertar religioso tardío, él decía que no lo veía imposible, porque las enfermedades a veces hacen cosas extrañas con la química del cerebro, pero advertía que, en ese caso, esa persona ya no sería él. "No sería yo de ninguna forma reconocible", aclaró.

Nunca, nunca se arrepintió de su descreencia ni en los peores momentos de su enfermedad tuvo pensamientos religiosos.

Creo que una persona con esta determinación y valentía se merece respeto. Respeto a lo que cree o deja de creer. Que su desaparición no sea plataforma para buscar conversos o predicar más y más religión. Sus pensamientos se merecen eso… RESPETO.

Pero no. Tienen que exprimir al máximo la posibilidad de manipular y tergiversar la última voluntad de un buen hombre, que a pesar de sus múltiples defectos, siempre quiso lo mejor para la humanidad y quienes le rodeaban.

Parecen gallinazos alrededor del lecho del moribundo mendigando alguna palabra de arrepentimiento y aceptación hacia Dios.

Yo nunca he visto a un Ateo insistiendo sobre la muerte de un Creyente… “El murió con una penosa enfermedad… de seguro renegó de Dios antes de morir”

Definitivamente hay que respetar las creencias y descreencias de los demás; Así no se ajusten a las nuestras.

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Por eso en honor al gran Hitchens… en este momento cuando termino de escribir esta frase… me tomo un trago de escocés que tengo al lado de este teclado y brindo por lo que fue un gran ser humano.

¡Salud dondequiera que estés apreciado Hitchens!

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Fuentes:
- http://en.wikipedia.org/wiki/Christopher_Hitchens
- http://www.christianpost.com/news/christians-grieve-death-of-christopher-hitchens-share-hopes-for-deathbed-conversion-65035/
- http://www.lanacion.com.ar/m2/1439401-hitchens-un-contrera-de-manual
- http://www.huffingtonpost.ca/douglas-anthony-cooper/christopher-hitchens-the-_b_1155149.html

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Ver: La Muerte según el Ateísmo

Ver: La Muerte según el Cristianismo

Ver: La Muerte según la Biblia

Ver Sección: Personajes

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